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Ante este vino sólo una idea en la cabeza: “No maquillajes, no retoques, no adornos”.
Natural. Agricultura Orgánica, Biodinámicas. Mínima intervención en Bodega.
La expresión del Mediterráneo más fresco, donde la elegancia y equilibrio, son el eje vertical de este vino.
Preciosa expresión de monte bajo, tierra mojada, monte umbrío. Con una boca poderosa que nos recuerda a los suelos férricos y las notas sanguíneas; taninos muy nobles con equilibrio dándole longitud y una elegante profundidad que le permitirá ser un vino de larga guarda.
Audentia Petit Verdot es ideal para acompañar con carnes de caza, arroces y quesos. Para apreciar sus características debe servirse a temperatura de bodega (16-18ºC), evitando un servicio a temperaturas más elevadas. Amarillo dorado. Aroma a fruta fresca madura con fondo de aromas cítricos y vainilla. Sabor fresco, elegante, con buen peso en fruta y acidez equilibrada.
Vino jugoso, con aroma a frutos rojos y notas volcánica, propias del paisaje negro debido a los hoyos cavados en la ceniza volcánica.
Vino Natural.
Al-muvedre es un vino monovarietal de Monastrell, que representa el espíritu del mediterráneo, esa expresión más meridional y luminosa que la Monastrell consigue ofrecer de forma única. Telmo Rodríguez es una de las referencias mundiales del vino español.
De trago fácil y con un final fresco y limpio propios de los vinos procedentes de esta cosecha.
Selva Vins es el proyecto personal del veterano viticultor mallorquín Carlos Rodríguez Furthmann. Pequeña bodega ubicada en la Sierra Norte Mallorquina con elaboraciones muy artesanales, con la mínima manipulación posible a los vinos y priorizando las variedades autóctonas.
Selva Vins fue la primera bodega de las islas en sacar al mercado vinos naturales y de mínima intervención con variedades autóctonas, como el primer ancestral (pet-nat) isleño, el primer clarete, uso de barricas de castaño, o monovarietales de uvas autóctonas con fermentación espontánea, entre otras elaboraciones novedosas en ese momento en su tierra natal.
Vino de mínima intervención.
Intenso color, expresivo en nariz, frutos rojos, mineral. Boca fluida, suaves taninos, jugoso y fresco.
Elaborado principalmente con uvas de viñedos muy viejos de Monastrell de bajo rendimiento al igual que las cepas de Cabernet-Sauvignon y Syrah plantadas a unos 700 metros de altitud, se obtiene un vino muy concentrado, complejo y al mismo tiempo muy elegante tras su paso por una cuidada selección de barricas de roble Francés y Americano durante 18 meses.
Julia Casado siempre cultiva sin agroquímicos, con variedades autóctonas de Bullas y parcelas certificadas en ecológico. Para ella, el vino tiene mucho que ver con la música. Le da una tremenda importancia al terroir, a las armonías, y a la vinculación de los vinos con el lugar, la espera y los silencios. Necesita sentir esa vinculación emocional con el terroir, conectando con la naturaleza y el lugar, de la misma manera que conecta con la música.
Es un vino de autor, elaborado como se hacía antes, sin recetas, sin fórmulas, solo pasión y emoción, atreviéndose a llevar la enología al límite donde hoy solo llegan los artesanos para conseguir la máxima expresión